viernes, 21 de junio de 2013

Arte y Pirotecnia, San Mateo Tlachichilpan



El  Estado de México se encuentra posicionado como uno de los estados con mayor número de pirotécnicos y comerciantes;  entre los 125  municipios de la entidad, destacan como productores los de: Tultepec, Almoloya de Juárez, Amecameca, Axapusco, Ozumba y Zumpango. Asimismo,  la pirotecnia es una actividad económica relevante pues da  sustento a 40 mil familias de forma directa y genera una derrama económica de entre 500 y 1,200 millones de pesos anuales;  actualmente en el Estado de México  se fabrica más del  50 % de la pirotecnia que se distribuye en todo el país.

Nuestro municipio sobresale por su arte en la pirotecnia, pues la localidad de San Mateo Tlachichilpan ha sido la generadora del oficio por décadas. La pirotecnia hoy en día, más que una tradición, es una forma de vida; ya que aproximadamente el noventa por ciento de la localidad se dedica a la fabricación y comercialización de fuegos pirotécnicos.

La pirotecnia es creadora de empleos directos e indirectos, ya que  a lo largo del proceso de producción,  elaboración  y distribución, alrededor de diez personas son las  involucradas en el  trabajo de un taller, así como en la comercialización, que llega a beneficiar hasta veinte personas.
En cuanto a los talleres, si bien se sabe el oficio es considerado de alto riesgo, se debe contar con una serie de permisos, acondicionamiento  y medidas de seguridad para la zona de trabajo. Como primer punto  el lugar de trabajo tiene que estar alambrado, tener un espacio divido en tres secciones: zona de  barriles, zona de almacenamiento y zona de producto terminado.  

Y a su vez por la zona militar (octavo regimiento)  es la indicada de verificar que se cumplan con las medidas de seguridad, los requerimientos son: un abastecimiento  de agua, palas, extintores, una separación del espacio de trabajo de, es decir, una para barril, palas, picos, extintores  y almacenamiento del producto terminado; así mismo el taller no deben tener  piso, ya que cualquier fricción podría ocasionar una chispa y ocasionar que los materiales reaccionen. El mismo es renovado anualmente; asimismo la Dirección de Protección Civil del municipio realiza una inspección trimestral.

Los materiales también son controlados, son necesarios una serie de permisos para poder obtener el material, esto de acuerdo al giro que se tenga, es decir, la cantidad de fuegos artificiales que  se produzcan, mismo material es proporcionado cada tres meses. 

Existe una gran variedad de  fuegos artificiales, la familia Fuentes se ha dedicado a lo largo de tres generaciones a la elaboración de  castillos, bombas, cohetes, toritos y canastillas. La materia  prima consiste en, barro, azufre, cloratos, nitratos, papel (tubos de papel) y pintura. Algunos de los elementos que emplean y los efectos que producen son: antimonio, produce el color blanco azulado; bicarbonato de sodio, produce el color amarillo; cloruro de mercurio, aumenta el color; sulfato de cobre, produce el color azul; sulfato de estroncio, produce el color blanco; azufre, presente en la mayoría de las mezclas y clorato de potasio, actúa como explosivo. 

 El procedimiento para la  elaboración de fuegos artificiales consiste en la mezcla de carbón y nitratos los cuales son molidos y posteriormente se secan para poder incluir los elementos que generan las luces de colores, mencionados anteriormente. El e ensamblado es cien por ciento artesanal, ya que solo hacen uso de mazos de madera para poder compactar la pólvora a la hora del llenado, de la misma manera en la decoración, usando solamente  pintura, pinceles y brochas.  

La castillería tradicionalmente es lo más representativo de la pirotecnia, pues son ampliamente utilizados en fiestas religiosas y sociales. Las estructuras de esta artesanía son impresionantes, pueden llegar a medir hasta 35 metros de altura, crean figuras y nombres con efectos visuales en movimiento, se combinan con detonaciones de bombas de luz que pintan el cielo de colores y son el toque especial de las festividades. El tiempo aproximado de ensamblado del producto oscila de una semana a dos, esto de acuerdo al tamaño del mismo. Estos espectáculos tienen una duración aproximadamente de 30 a 60 minutos.
Los toritos se fabrican con una armazón de carrizo e hilo; se forra la estructura con periódico y cartón, después se adorna con papel de colores y se fija sobre dos ruedas; al momento de encenderlo y torearlo, lanza buscapiés.

La pirotecnia se trabaja de acuerdo a los pedidos, teniendo mayor producción a partir del mes de septiembre que comienzan las fiestas patrias hasta las decembrinas. La familia Fuentes  ha extendido la distribución de su producto a todo lo largo de la república mexicana;  asimismo,  ha obtenido diversos premios y reconocimientos con la participación de la Unión de Pirotécnicos de la localidad., obteniendo el año pasado el primer lugar en la feria de Tultepec; en donde  existen diversas categorías como son: temas políticos, la caricatura o el alebrije.

Sin duda alguna, San Mateo Tlachichilpan  ha jugado un papel muy importante en el arte de la pirotecnia y ha mantenido el nombre de Almoloya de Juárez muy en alto. La pirotecnia hoy en día es fuente de empleo para miles de personas, por ello es importante adquirir productos nacionales, que cuentan con mayor calidad que  son totalmente seguros y nos ayudan a continuar con esta noble tradición mexicana.


*Agradecemos las facilidades otorgadas para la realización, a María Estela Fuentes Álvarez y  Edgar Alfredo Fuentes Galván.

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